¿Cuál es el periodo de prueba de un contrato?
El periodo de prueba es una figura que se encuentra contemplada en la mayoría de los contratos laborales. Se trata de un tiempo determinado que se utiliza para evaluar el desempeño del trabajador y decidir si se mantiene o no la relación laboral.
¿Cuánto tiempo dura el periodo de prueba?
El tiempo de duración del periodo de prueba está establecido por la ley, y puede variar en función del tipo de contrato y del convenio colectivo que se aplique en cada caso. En la mayoría de los casos, el periodo de prueba no puede superar los seis meses para los técnicos titulados y los dos meses para los demás trabajadores.
¿Qué condiciones se establecen durante el periodo de prueba?
Durante el periodo de prueba, el trabajador tiene los mismos derechos y obligaciones que el resto de los trabajadores de la empresa. Sin embargo, la empresa tiene la facultad de rescindir el contrato sin necesidad de alegar causa alguna, y sin que el trabajador tenga derecho a indemnización alguna.
¿Qué ocurre al finalizar el periodo de prueba?
Al finalizar el periodo de prueba, la empresa debe tomar una decisión sobre la continuidad o no del contrato. Si la empresa decide continuar con la relación laboral, el trabajador pasa a formar parte de la plantilla de la empresa con los mismos derechos y obligaciones que el resto de los trabajadores.
¿Puede la empresa prorrogar el periodo de prueba?
No, la empresa no puede prorrogar el periodo de prueba más allá del periodo establecido por la ley o por el convenio colectivo que se aplique en cada caso.
Conclusión
En resumen, el periodo de prueba es una figura que se utiliza en los contratos laborales para evaluar el desempeño del trabajador y decidir si se mantiene o no la relación laboral. Su duración está establecida por la ley, y el trabajador tiene los mismos derechos y obligaciones que el resto de los trabajadores durante ese periodo. Si la empresa decide continuar con la relación laboral, el trabajador pasa a formar parte de la plantilla de la empresa con los mismos derechos y obligaciones que el resto de los trabajadores.